Carmelo Peralta Rivero, investigador de CIPCA, comenta acerca de los cambios climáticos, la agricultura y la situación actual de la producción en el área rural.
Frente a los Cambios Climáticos y las desvaloraciones de la comida sana, la agricultura parece no ser la mejor opción para los campesinos, ¿Cuál es la situación actual que ellos viven frente esta realidad?
Es cierto que constantemente los cambios climáticos, el fenómeno de El Niño y otros eventos cada vez son más intensos y tienen sus efectos en los rendimientos de los cultivos. También es verdad que existe una desvaloración de la comida sana por parte de mucha gente en Bolivia.
Según datos de la Fundación Heinrich Böll la red de campesinos a nivel mundial no solo provee de alimentos al 70% de la población, sino que también produce el 70% de alimentos en el mundo.
El estudio también afirma que la agricultura urbana es responsable del 15% de los alimentos consumidos en áreas urbanas, esto incluye el 34% de la carne y el 70% del huevo. Toda esta comida es producida con menos del 25% de los recursos, como ser agua, suelo y combustibles.
Para finales del 2017 se prevé que el mercado mundial de aguacate sufrirá un desabastecimiento importante a causa de la caída en la producción de México, Perú y EE. UU.
En México, la estacionalidad del cultivo y las condiciones secas ocasionarán una caída en la producción; además de que un porcentaje importante se destinará a abastecer el mercado local.
Desde hace más de 16 años los principales conflictos de acceso y posesión de tierra en Latinoamérica están relacionados principalmente con conflictos entre los Estados, las empresas y las comunidades campesinas e indígenas.
Según señala OXFAM y su informe denominado “Desterrados: tierra poder y desigualdad en América Latina” las concesiones mineras y petroleras se han multiplicado desde el año 2000 en Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú.